Ana María Díaz
Ana María Díaz

Ana María Díaz
Ana María Díaz, nacida en Baza (Granada), es una autora de literatura infantil comprometida con la transmisión de valores y la creación de mundos mágicos que inspiran a niños y niñas a soñar, aprender y crecer. Desde pequeña sintió una conexión especial con los cuentos, y hoy, esa pasión se ha convertido en el motor de su vocación como escritora: crear historias que no solo entretienen, sino que educan, emocionan y dejan huella.
Apasionada por los relatos que combinan la fantasía con mensajes significativos, Ana María se siente especialmente identificada con dos géneros que marcan su estilo: los cuentos de hadas y los cuentos con valores. En su obra, la magia y la enseñanza caminan de la mano, mostrando que se puede volar con la imaginación sin perder de vista la importancia de la empatía, la honestidad, la gratitud o la solidaridad.
Su lema personal, que guía tanto su vida como su escritura, es claro y potente:
“Si dejas de soñar, dejarás de vivir.”
Esa frase resume su filosofía de vida y su propósito literario. Para Ana María, soñar es esencial para vivir con plenitud, especialmente en la infancia, una etapa donde la fantasía no solo es bienvenida, sino necesaria. Sus cuentos buscan precisamente eso: mantener vivo el asombro, despertar la curiosidad y recordar tanto a niños como adultos que la imaginación es una herramienta poderosa de transformación y aprendizaje.
Entre los cuentos que más la han inspirado se encuentran títulos como “¿A qué sabe la luna?”, una tierna historia sobre la cooperación y el deseo compartido, y “Aladdin”, el clásico cuento oriental lleno de aventuras, magia y enseñanzas sobre el poder interior, la lealtad y la importancia de ser uno mismo. Siempre ha sentido fascinación por los cuentos de hadas, y Aladdín es uno de los que más la han marcado. Esta influencia se refleja claramente en sus obras, donde lo fantástico se entrelaza con lo emocional y lo humano.
La obra de Ana María se caracteriza por un lenguaje sencillo, cálido y evocador, accesible para los más pequeños pero con múltiples niveles de lectura. Cada cuento es una invitación a viajar a mundos encantados, donde conviven dragones, animales parlantes, estrellas curiosas o lunas que susurran secretos… pero también es una forma de hablar de lo que realmente importa: las emociones, los valores humanos y las pequeñas grandes decisiones que construyen el carácter.
Ana María también ha encontrado inspiración en su propia experiencia vital. Como paciente de epilepsia y maestra que ha trabajado con alumnos con esta misma patología, sintió la necesidad de crear una historia que ayudara a visibilizar la epilepsia desde la infancia. Decidió escribir un cuento que permitiera a los niños aprender sobre esta condición de una forma natural, respetuosa y educativa. Su objetivo fue claro: fomentar el conocimiento, enseñar la forma de actuación ante una crisis y, sobre todo, promover la inclusión real del alumnado con epilepsia. Esta iniciativa nace del corazón, del compromiso y de su profunda vocación como educadora.
Conscientes de la importancia de la lectura como herramienta educativa y emocional, sus historias están diseñadas para ser utilizadas tanto en casa como en la escuela. Son cuentos pensados para abrir conversaciones, ayudar a gestionar emociones, reforzar valores positivos y, sobre todo, crear momentos de conexión auténtica entre quienes los leen y quienes los escuchan.
Además de escribir, Ana María disfruta de otras formas de creatividad que se entrelazan con su universo literario. Es una entusiasta del crochet, actividad que le permite dar vida a los personajes de sus propios cuentos. Crea muñecos personalizados con aguja e hilo, muchos de ellos inspirados en las protagonistas de sus historias, añadiendo una dimensión visual y artesanal que encanta a los más pequeños y enriquece su propuesta como autora.
Ana María considera que los cuentos tienen un papel esencial en el desarrollo emocional infantil. Para ella, una historia bien contada puede ayudar a un niño a entender sus sentimientos, superar un miedo o aprender a ponerse en el lugar del otro. Por eso, cada uno de sus relatos nace de la reflexión, la observación del mundo infantil y el deseo de acompañar a los niños en sus descubrimientos vitales, siempre con una chispa de magia.
Aunque se encuentra en las primeras etapas de su camino como autora publicada, su voz ya empieza a destacar dentro del universo de la literatura infantil con valores. Su sensibilidad narrativa, unida a una imaginación vibrante y a un profundo respeto por la infancia, hacen de Ana María Díaz una autora con una propuesta genuina y transformadora.
Escribe para que los niños nunca dejen de soñar, para que encuentren en las páginas de un cuento el reflejo de sus emociones, y para que descubran que la magia existe, sobre todo cuando se vive con bondad, coraje y corazón.
Ana María Díaz forma parte de una nueva generación de escritoras que apuestan por una literatura que no solo entretiene, sino que enseña a vivir, con valores, imaginación y mucha ternura. Sus cuentos son una ventana a mundos maravillosos y también un espejo donde los niños pueden reconocerse, aprender a quererse y comprender mejor a los demás.
Porque en sus palabras, soñar no es solo un juego: es una forma de vivir con propósito y alegría, de crecer sin perder la magia.